viernes, 5 de noviembre de 2010

Aguas milagrosas

En los anales de la Virgen de Lourdes hay una joya que no me resisto a compartir con vosotros, seguidores de la oveja feroz. Dice así:
“No sabría como agradecerle -escribe un sacerdote- no sólo que haya respondido a mi deseo, sino también que haya tenido la delicada atención de haberme enviado el agua milagrosa el día mismo de la Inmaculada Concepción. Uno de mis enfermos se ha beneficiado mucho. Se la he dado a beber, sin que lo sospechara, duran¬te nueve días. Y este individuo, que durante catorce años ha estado entre la vida y la muerte, y que se me había resistido con una testarudez desesperante y con blasfemias que causaban escalofríos, expiró dulcemente después de la novena toma, dando sentimientos de una piedad tanto más consoladora cuanto que era inesperada."
Total, que el hombre llevaba 14 años luchando contra la enfermedad, llega el agua milagrosa de la virgen y la espicha. ¿Milagro? Y lo escriben para que lo leamos. Joder como está el mundo… de los milagros.

La oveja feroz
05.11.10

2 comentarios:

  1. Es coherente.En la pequeña ciudad donde resido, hay un grupo de personas creyentes -no precisamente católicas- que se reunen una vez a la semana para pedir por los seres que sufren, cuyos nombres los vecinos les alcanzan. Un alto porcentaje de los sufrientes se ha curado o mejorado notablemente. Y otros,pasaron a mejor vida.Está dentro de lo que cabe esperar.

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  2. Los que mejoraron, ratificaron la buena práctica. Los que emperoraron, se olvidaron. Pasa con los pronósticos, que miles de fallos no cuentan, pero un acierto dotan a su augir de fama imperecedera.
    La oveja feroz.

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