Imagínate que vas andando de noche por un bosque umbrío. Llevas un farol que apenas ilumina unos metros por delante de ti. Entonces aparece de no se sabe donde un personaje que se planta delante y te dice: “Amigo, debes apagar tu candil para poder encontrar más claramente el camino”. Y tú piensas: este tío o es un discípulo de Paulo Coelho o esta chiflado. O ambas cosas, que es lo más normal. Pero no, te equivocarías, es un teólogo. Los teólogos quieren que apagues el candil de la ciencia para guiarte por el mundo. Su candil se llama fe, y no alumbra, pero a muchos les consuela, pues aunque no puedan ver el camino creen que están bien encaminados. Y a eso se reduce la vida, a elegir bien el candil que queremos que nos ilumine el camino.
La oveja feroz
26.01.11
miércoles, 26 de enero de 2011
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¿Que la fé no ilumina? Conozco una viuda cuyo esposo había dejado escrito y depositado un testamento en cierto bufete de escribano.Cuando llegó el momento que el Juez requirió el tal documento,éste no aparecía.Meses pasaron en su búsqueda.La viuda cada quince dias visitaba la escribanía y preguntaba por el desaparecido documento.Lo buscaban, pero seguía ausente.Desesperada,la viuda buscó ayuda con una amiga suya que también lo era del escribano.La amiga le dijo que,pidiera a SANTA ELENA,patrona de los objetos perdidos,para que el testamento apareciera.La viuda en ese mismo momento invocó a la Santa, y al TERCER DIA,estaba el testamento en manos del Juez. Creer o reventar,hijo mío.
ResponderEliminarPues reventar, mi amigo, reventar. Sería una forma de morir más digna que aceptar la cobardía de la fe, que sólo mueve las montañas que ella misma ha creado.
ResponderEliminarLa oveja feroz