lunes, 18 de mayo de 2020

Críticas cinematofágicas: Los enemigos de Peter


Críticas cinematofágicas: Los enemigos de Peter

Los enemigos de Peter

Tragicomedia británica dirigida por el renombrado Quénez Bragas. Un joven enfermo invita a sus más íntimos amigos a su mansión. Desea recordar viejos tiempos antes de decirles la terrible enfermedad que le aflige. Los amigos, ante la perspectiva de pasar un fin de semana de gorra, acuden presurosos. Durante dos días se ponen las botas a comer y beber y hablan de sus aventuras compartidas y sus frustraciones y sus experiencias amorosas. El domingo a la tarde, después de una copiosa comida, Peter anuncia a sus amigos que una grave enfermedad le aflige. Sus amigos, las copas de coñac detenidas a mitad de camino entre la mesa y sus bocas, le miran sorprendidos. Disfrutando del efecto causado en sus oyentes, Peter, con voz teatralmente compungida, les descubre que sufre de dolorosas almorranas. Sus amigos abren la boca como barbos. Después del consabido estupor, le abuchean. Peter, dolido de semejante indiferencia frente a su enfermedad, les declara enemigos y les cobra el fin de semana a precio de hotel de cuatro estrellas y pensión completa. Sus amigos, trocados en enemigos, se marchan, un poco más pobres, echando pestes del cabrón de Peter. Peter, mientras cuenta avaramente la recaudación, prepara la siguiente lista de amigos. Film tierno y didáctico sobre el valor de la amistad. Sublime Emma Tromson, a quien no se le nota su estancia pasada en la clínica de Alcohólicos Anónimos. Película recomendada para aquellos que carecen de amigos o éstos no son tales.

Fred Cineman
Crítico de su majestad

lunes, 4 de mayo de 2020

Críticas cinematofágicas: My Fare, Lady


Críticas cinematofágicas: My Fare, Lady

My Fare, Lady

Historia de un famoso galanteo acaecido en la Inglaterra victoriana. Una mujer de alta alcurnia, Lady Tea, se enamora de Lord Oftheflies, un excéntrico aristócrata famoso por sus lacónicas y cortantes frases. La mujer persigue al aristócrata, organiza fiestas para que acuda, partidas de bridge, incluso cacerías de zorros. Pero Lord Oftheflies prefiera la cacería de zorras y su soltería. Tanto insiste la mujer que Lord Oftheflies, en una fiesta en la mansión de los condes de Winston Chesterfield, delante de todos los invitados, le espeta a la acosadora: "My fare, Lady", entregándola un papel con el importe en miles de libras de la tarifa que la mujer habría de pagar para alcanzar sus favores. Lady Tea se desmaya, lo que no es mella para que Lord Oftheflies se tome una copa de sherry de Oporto. El final feliz de la historia contrasta con la acidez que el film desprende durante casi toda la proyección, pero la sombra de la moral victoriana se extiende hasta nuestra época. Impecable la actuación de Rex Oedipos en el papel de Lord Oftheflies y un poco floja la de Audrey Helporn en el suyo de Lady Tea.

Fred Cineman
Crítico de su majestad