lunes, 28 de septiembre de 2015

Carlos Fabra sigue dando titulares

· Descubiertos sus chanchullos y marrullerías financieras al frente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra ha decidido diversificar sus dones de ganar dinero. Gracias al periodo de reposo en la prisión, y a sus contactos, ya tiene apalabrado el próximo premio Planeta y el Nadal, así como el premio Max de teatro. Ya tiene encargadas (perdón, escritas) las obras respectivas.
· Carlos Fabra gana el bingo de la cárcel por séptima vez consecutiva y los presos renuncian a esta nueva forma de esparcimiento alegando amaños en el juego.
· Carlos Fabra nombra al nuevo director de la cárcel donde cumple condena. Un sobrino suyo ha obtenido el contrato del catering.
· Carlos Fabra obliga a todos los presos de la cárcel donde cumple condena a ver las tres películas de El padrino, que luego comenta como si fuese su biografía.

La oveja feroz

28.09.15

lunes, 21 de septiembre de 2015

Grupos de masoquistas alternativos promueven el derecho a las operaciones sin anestesia.

Grupos organizados de masoquistas se han manifestado en Sevilla bajo un sol implacable y una temperatura cercana a los cincuenta grados, en favor del derecho a las operaciones sin anestesia. Argumentan que la minoría que representan tiene derecho a que se le reconozcan sus peculiaridades, como a los homosexuales y a los que van en sillas de ruedas. Una sección de este colectivo, denominada “masoquistas políticos” abogan a que gobierne siempre el PP y dar carta blanca a los que se forran a cargo del Erario Público. La policía ha recibido órdenes de no intervenir, pues el golpearlos podría darles tanto placer que la protesta no acabara nunca.

La oveja feroz

21.09.15

lunes, 7 de septiembre de 2015

Críticas eliterarias: Paisajes después de la botella

Paisajes después de la botella
de
Juan Güisquisolo

Patético relato de un hombre vencido por el delirium tremens. El protagonista, un hombre que ha hecho del morapio su opio, narra, con un optimismo que debe mucho a Cioran y Thomas Bernhard, sus visiones provocadas por la incontinencia. Desde las habituales alucinaciones de insectos reptando por las paredes de su cuarto (entre las que destacan sus repetidas representaciones de chinches copulando con chinchetas), hasta las imágenes terroríficas de un portavoz al que muertos republicamos clamaban justicia llamándole “Hernando, Hernando”, mientras él sonreía con chulería (qué sonrisa más horripilante), el narrador describe un sinnúmero de visiones a cual más clarificadora y pintoresca. Por su belleza resalta la fantasía que muestra a una conocida estrella de cine, cuyo nombre omitimos por decencia, en el momento de meterse una botella de Rioja por cierto sitio innombrable, botella que, para sosiego del delirante, está vacía. Otra visión que impresiona por su crudeza es la que representa a un hombre que repta por una alfombra de alambre de espino para alcanzar un garrafón de tinto, garrafón que se aleja a medida que el sujeto se desgarra el cuerpo con los pinchos de la alfombra. El protagonista recurre a varios terapeutas, pero las deudas contraídas por los altos honorarios de éstos, cuando finalmente se encontraba curado, le llevaban de nuevo a aferrarse a la botella. Obra aleccionadora para aquellos que consideran que ella, la botella, es la mejor amante.
Obra publicada por Ediciones B/ODO con el patrocinio de la Asociación de Alcohólicos Conocidos.

Leo Bücher
Crítico de su majestad

07.09.15