Críticas cinematofágicas
Lo que Adviento se llevó
Folletón cinemitográfico que utilizando como
trasfondo la guerra civil americana, nos cuenta una peculiar historia de amor.
Una opulenta sureña, con mansión rodeada de árboles y docenas de criados de
color, de color negro, se enamora de un capitán sudista, esto es, con problemas
de transpiración. El capitán consulta con muchos médicos su problema
"sudista", hasta que concluyen que el problema reside en el uniforme,
que no ventila bien. Deja el ejército y se hace con la administración de
inmensos campos de Don Algodón. Su novia, de familia patricia, le informa que
su padre sólo consentirá en su boda si logra hacer fortuna en poco tiempo. El
ex capitán, magistralmente interpretado por Glar Cable, para sacar mayor
beneficio de sus campos algodoneros, despide a la mitad de los esclavos,
creando la figura del destajo en la recogida de algodón. Todo parece ir bien
hasta que llega el viento de Adviento, un viento avariento, desapacible y que
arrasa con la flor del algodón de sus campos. Lo que Adviento se llevó,
advierte el advientado, no era sólo su futuro beneficio agrícola, sino su
inminente braguetazo, por lo que el capitán no tiene más remedio que apuntarse
de nuevo al ejército, sólo que esta vez, avezado, se hace del ejército yanqui,
que posee más "moral", y su uniforme, hecho de fibra artificial y
tela de mallas en los sobacos, no le hace sudar tanto. Su ex prometida,
inolvidable recreación de Anna de Halloween, se queda compuesta y sin novio, y
al final, en una escena inolvidable, jura ante Dios que jamás volverá a pasar
de hombres. Histórico film que dura casi cuatro horas, más o menos lo mismo que
la jaqueca que produce su visión. No recomendable para inmigrantes introducidos
en patera.
Fred
Cineman
Crítico de su majestad