sábado, 12 de febrero de 2022

Críticas cinematofágicas: Las cuatro jinetas del Apocalipsis

  

Las cuatro jinetas del Apocalipsis

 Muestra políticamente incorrecta del nuevo cine cubano. Cuatro "jinetas" habaneras (término que designa a las muchachas sin flor que por dinero cabalgan a los turistas) esparcen todo tipo de enfermedades infecciosas entre los visitantes varones a la isla. Las muchachas, de buen ver y mejor tocar, desconocen su enfermedad, que transmiten en cada cabalgada. Como son buenas trabajadoras, la enfermedad se transmite en breve plazo por los cinco continentes. Alertadas las autoridades sanitarias cubanas, incuban muestras de los virus transmitidos. Como carecen de medios, guardan las muestras en hielo picado, hasta que se acaba el hielo y las muestras mueren. Y la gente se pregunta: ¿Qué se incuba en Cuba? Y algunos responden: "En Cuba se incuba una vana Habana". Mientras tanto, las mulatas siguen transmitiendo el mal y exportando el Apocalipsis. La Organización Mundial de la Salud toma medidas, lo que conlleva que los féretros se acoplen mejor a los difuntos. A todo esto Fidel (su espíritu) interviene y acusa a las autoridades sanitarias internacionales de trabajar para los EE.UU. Y para demostrar que todo es un invento para desacreditar a la Revolución, él mismo se acuesta con las cuatro jinetas (a través de la médium Haydee Santamaría de Dios. En el siguiente mitin, aparece el ectoplasma del líder cubano con dodotis bajo el pantalón y con calvas extrañas en las barbas, que atañe a ciertas plagas enviadas desde Miami. "A mí, a mí", clama el pueblo que atiende la concentración... Película de paciencia ficción que necesita de toda la buena voluntad revolucionaria para aguantar hasta el final. Lo más interesante, las jinetas.

 

Fred Cineman

Crítico de su majestad