El
sudamericano impasible
de
Grajam
Grin
La acción de esta novela tiene como fondo la
guerra de Camboya. En la ciudad de Pi
Joh, bajo dominio de los Jmeres Negros, un diplomático argentino traba
amistad con un yanqui en el casino local durante sus largas mateadas. Dando
vueltas con la bombilla en la taza de la verde infusión, el sudamericano
escucha las teorías pacifistas del yanqui, quien le cuenta que está tratando de
vender armas a la resistencia y a la vez a las fuerzas de los Jmeres Negros
(“Just fair play, my friend”), así como ayudarles a construir industrias
químicas desmontables donde producir aspirinas, biomanán y gases venenosos.
También trafica con goma-2, cocaína y falsos Lacoste, que es lo que más pasta
le proporciona. El sudamericano, mate que te mate, escucha las aleccionadoras
historias del norteamericano con admirable impasibilidad. Salvo lo de los
falsos Lacoste, que le afecta ligeramente, pues acaba de adquirir uno a precio
europeo, lo demás le da igual. Él sólo quiere pasar, matear y leer a Oswaldo
Soriano. Un día el yanqui, después de asistir a los oficios de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día Descansó, es arrollado por una bicicleta. El
conductor del vehículo se da a la fuga y el yanqui a la bebida, pues a resultas
del accidente pierde credibilidad en el mercado negro de polos, arrebatándole
el negocio un británico que suministra falsos Burberry. El yanqui trata de
introducirse en el negocio de los antibióticos caducados, pero fracasa. Busca
refugio en su religión, y termina vendiendo Biblias expurgadas. Mientras tanto
el sudamericano continúa con sus mates (mate aunque me mate), sus sentadas en
el casino, su impasibilidad sesudamericana. Obra cumbre de Grajam Grin, la
novela es un canto a la fraternidad humana. Cuiden que al libro que compran no
le falten páginas, pues el yanqui de la novela participa en el capital de la
editorial.
Leo
Bücher
Crítico
de su majestad
29.06.15