Un
autobús de línea llamado deseo
Film de Elías Sobakazán basado en la obra de
teatro homónima del dramaturgo Mississippi Williams. Un Blando Marlone en el
papel de Kowalski da la réplica a Blanca Blanche, la cuñada cursi que
interpreta magistralmente Vivian Leicht, mehr
Licht. Blanche acude a visitar a su hermana que vive en un suburbio de
Baltimore, o puede que sea Conneticut, en todo caso un barrio cutre lleno de
polacos emigrados en camiseta y con los sobacos sudados. La asfixiante
atmósfera de la película contribuye, de forma notoria, en el aumento del
consumo de bebidas y helados del puestillo establecido en el vestíbulo, dato
microeconómico que quizás explique que la película lleve dos años en cartel a
pesar del poco público asistente. Como decíamos, Blanche acude a casa de su
hermana y se encuentra con un chulo Kowalski en camiseta y que no hace otra
cosa que beber cerveza y jugar a los bolos con sus amigotes. Blanche, cursi y
melindrosa, le pide a su cuñado que abandone el uso de camisetas sudadas y se
compre una camisa como dios manda, a lo que el aludido contesta con un eructo
que hiede a lúpulo. Al final, a Blanche no le queda más remedio que adquirir un
perfume que huela a cerveza para conseguir al deseado y sudoroso Kowalski. Advertimos
a los posibles espectadores que está prohibido acudir a las sesiones con
bebidas adquiridas fuera del establecimiento. Pañuelos y abanicos sí se
permiten. Y que ustedes lo suden bien.
Fred Cimeman
30.12.19