Sobre
el origen de las especias
de
Charles
Darwin von Pepper
Sobre el origen de las especias es libro
picante, sabroso, condimentado con anécdotas y haute cousine literaria. Todo nace de un viaje que su autor,
ayudante de cocinero (marmitón) de un restaurante escocés, emprende alrededor
del mundo buscando nuevos sabores con los que entretener el paladar de sus
conciudadanos, que tenían el suyo echado a perder con los guisotes á la Inverness y la cerveza negra de
alta graduación. Como grumete, se enrola en el bergantín Freagle, que iba a dar
la vuelta al mundo porque su capitán, un sibarita liverpoolnés, se le había
puesto en los huevos hacer semejante periplo y olvidarse de su mujer y cinco hijos
que dejaba en el pueblo de los Beatles, aunque entonces no lo sabían, pero que
de haberlo sabido le hubiera dado igual, pues odiaba la música, salvo la de las
esferas, dos bolas de latón que no paraba de tocar durante las travesías.
En
el Freagle, Darwin von Pepper iba recogiendo muestras de especias en cada
puerto que recalaba, algo de clavo por aquí, algo de pimienta por allá, y luego
lo ordenaba todo sobre una mesa y los registraba. Con sus registros acudía al
marmitón del Freagle y le decía, que sin enterarse el cocinero, un malayo de
malas pulgas y perores salsas, fuera echando en los peroles un poco de cayena,
un poco de nuez moscada, una puntadita de azafrán, una raya de pimentón. Darwin
anotaba en su cuaderno, de forma precisa, los efectos de las diversas especias
sobre los comensales (así llamados porque “comen sales”, lo cual era
perjudicial para la salud). Al hilo de estas observaciones, Darwin pudo ver la
evolución de los condimentos en base a las distintas especias utilizadas,
llegando a la conclusión de que la cocina evolucionaba…
Leo Bücher
26.12.16